El coach flexible ve las cosas con múltiples opciones, no solamente como bien/mal o acertado/erróneo.
Frecuentemente se arriesga a preguntar cosas, cuyas respuestas les puede sorprender, en lugar de preguntar para escuchar lo que ya saben o piensan que saben.
Permiten que sus clientes, opinen y expresen incluso cosas muy dispares de lo que ellos mismos creen. Les permiten que creen sus propias estrategias, a pesar de que pueden tener una que le funcionaria muy bien a su cliente.
Sabes que eres un coach flexible, cuando tú mismo estás aprendiendo tanto de tu cliente como él/ella lo está aprendiendo de sí misma/o.